Taj Mahal, símbolo del amor eterno.

Se dice que el emperador Shah Jahan (“El Rey del mundo”), a sus 15 años siendo apenas un príncipe, conoció a una hermosa joven de la cual se enamoró y a partir de ese momento se convirtió en el amor indiscutible de su vida, sin embargo, tuvieron que pasar 5 años para que ellos pudieran casarse, ya que los astrólogos del reino consideraban que ésta era la fecha indicada para la felicidad del matrimonio, tras la boda a la joven le fue otorgado el titulo de Mumtaz Mahal (la elegida del Palacio).

Por su parte, el entonces príncipe previamente había tomado otras tres esposas por su derecho polígamo, a pesar de ello, a partir de su enlace con Mumtaz Mahal toda su atención y afecto se volcaron hacia ella, siendo ésta la dueña de su total fidelidad.

Después de 19 años de feliz matrimonio y 14 hijos, la tragedia interrumpió esta hermosa historia de amor y Mumtaz Mahal muere dando a luz a su ultimo hijo.

Tras la muerte de su esposa, el emperador se sumió en una tristeza infinita y decidió erigir en honor de su amada un monumento esplendido donde reposaría para siempre.

La construcción tardó aproximadamente 22 años, requirió de 20,000 obreros y está hecha en mármol blanco y miles de piedras preciosas que complementan su ornamentación. Años mas tarde al morir el emperador, sus restos fueron enterrados en el mismo mausoleo al lado de su amada eterna.

La palabra “Taj” proviene del persa y significa “corona”, mientras que “Mahal” es el diminutivo de Mumtaz Mahal. 

El Taj Mahal es un conjunto edilicio de 17 hectáreas formado también por una mezquita, una casa de invitados y amplios jardines. Como si de un cuento encantado se tratara, los colores del Taj Mahal se  transforman durante el día. 

En 1983 fue designado por la UNESCO como Patrimonio de la Humanidad por ser «la joya del arte musulmán en India y una de las obras maestras del patrimonio mundial admiradas universalmente». En 2007 fue reconocida como una de Las Nuevas Siete Maravillas del Mundo Moderno.